domingo, 16 de agosto de 2009

"Y ahora voy a ser un cabrón"

Me tomaba unas birras con un amigo el otro día mientras nos echábamos unas risas y echábamos, también, algún que otro exabrupto a la salud de los cabrones varios con los que nos hemos ido topando últimamente.
Me contaba que lo había pasado un poco mal, que la última tipa era la peor de todas... y después de unas cuantas cervezas y con ojos ya enturbiados acababa su disertación con un claro y rotundo... 'y por eso, a partir de ahora voy a ser un cabrón'.
A mi, que llevaba alguna que otra cerveza encima también, me entró la risa pero al mismo tiempo noté como se me elevaba la ceja de forma inevitable...
'No, no lo serás', le dije entre risas. Y sin embargo él, muy serio, me contestó: 'la gente puede cambiar... mucho...'.

La cosa es que me quedé con la anécdota en la cabeza y eso como siempre acaba llevándome a escribir, para ver si entiendo por qué cada vez que pienso en ello, la cejita del demonio se me levanta de nuevo.

Pensándolo bien, me he dado cuenta de que esa reacción es algo de lo más habitual, a todos se nos va un poco después de una mala experiencia. Estamos dolidos, cabreados... y sin embargo, yo lo veo así:
A mi me han hecho daño, así que ahora voy a hacer daño yo. Pero en realidad, no tiene ningún sentido.
Tu eres consciente de lo mal que lo has pasado, vas entonces, ahora, a hacer pasar por lo mismo a la próxima persona que pase por tu vida? Y qué culpa tiene esa pobre persona? Cómo puedes desearle a alguien que se sienta igual de mal que te has sentido tú? No es acaso la decisión más terrible que puedes tomar? Y hará lo mismo esa persona una vez que tu hayas terminado con ella? Herida, irá a hacer daño a alguien más? Y quién gana en todo esto? Te hará sentir mejor a ti?

En realidad, tú quieres devolverle la pelota a la persona que te las ha hecho pasar canutas, pero como no vas a poder, mejor fastidiar al próximo incauto que se te acerque...
No, definitivamente no me convence. Todo el mundo merece un respeto y una oportunidad. Llámame loca, si quieres, pero a mi me pasa al revés. Si estás en una situación que no te gusta, lárgate y si alguien te ha hecho pasarlo mal, bajo mi punto de vista, lo que debes hacer es intentar no hacerle a nadie, nunca, lo que te han hecho a ti.
Eso claro, si tienes un poquito de corazón... que es un bien, que por lo visto, últimamente, escasea...

domingo, 2 de agosto de 2009

Armada hasta los dientes

Todos los días la misma mierda:
Los para qué's:
- No sé para qué has estudiado una carrera tan larga y tan complicada...
- No sé para qué te has tenido que ir al extranjero...
- No sé para qué tuviste que dejar a ese chaval, si era buen chico y te quería tanto...
- No sé para qué te sirve saber idiomas...

Los para qué te vas a esforzar:
- Tú haz lo que tengas que hacer, no te esfuerces de más, mujer, para lo que te pagan...
- Si mujer... si tu jefe es un machista hijo de puta, pero todos son así, vayas donde vayas, qué le vas a hacer...
- Es posible que te paguen menos que a ese tío, porque el tiene una tranca colgando, vete acostumbrando...
- ¿Te vas a poner a mirar otro curro? Buffff, pues no vas a encontrar nada, tal y como está la cosa...
- ¿Crees que vas a encontrar algo mejor? (cara maternal/paternal), jajaja, ya aprenderás ya...
- Para qué te vas a arriesgar a hacer un trabajo así, búscate uno tranquilito, de esos para toda la vida, que te paguen decéntemente y punto.
- Si mujer... aquí la gente es un poco provinciana, pero no te vayas a otro sitio, vaya complicación, con lo sencillo que es todo aquí...
- No te vayas de casa de tus padres, si total, ahí te lo dan todo hecho...
- A ver si te piensas que por luchar más vas a acabar siendo mejor que yo, que mira, llevo toda la vida tocándome el rabo y vivo de coña (cuestionable...).

Yo veo el camino claro delante de los ojos pero una y otra vez, me bombardean, quieren arrebatarme lo que tengo por arrobas: la determinación, las ganas de superarme (ya sé que soy una chica, y que no debería, putada que me hayan educado como a un tío desde que me salieron los dientes, para comerme la vida con patatas, ñam ñam)...
Llámame ambiciosa, llámame como te de la gana, sigue atacándome, ráscame en mis puntos débiles si quieres...
Y quizá algún día, no digo que no, quizá algún día, alguno de vuestros para qué's me cale.
A lo mejor, me gane la vida la partida, y acabe conformándome con un tío cualquiera, como hacéis tantos y tantas... porque es muy cómodo y mejor este 'no me da ná' que estar solita (a mi casi casi me pasa una vez).

Pero si pierdo, si me doblego, lo haré peleando, lo haré quitándole con los dientes la argolla a la última granada, quemando el último cartucho... y os tengo que decir, cabrones (tíos machistas, tías conformadas orgullosas, mediocres en general y especialmente a los de 'ESTO ES LO QUE HAY'), que estoy armada hasta los putos dientes.